Sublime, sublime, sublime.

Mis días aquí fueron pura magia. La habitación era un sueño, con un balcón que daba al jardín lleno de palmeras. un lugar perfecto para disfrutar del desayuno. El menú de degustación fue un viaje. Cada plato era una explosión de sabores, y los postres, especialmente las madeleines, me dejaron sin palabras. ¡No olvides probarlos!

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La piscina es agradable y acogedora para relajarse.

El aire acondicionado era insuficiente para el calor extremo. A veces, el personal tardaba en atender nuestras solicitudes, lo que fue frustrante. Además, la relación calidad/precio del desayuno parece excesiva para lo que ofrece.

El menú degustación es excepcional, no te pierdas la oportunidad de preguntar por las opciones de maridaje de vino durante tu cena.

Las ensaladas eran realmente frescas y sabrosas, perfectas para el clima cálido. Sin embargo, la habitación no estaba tan bien aislada contra el ruido exterior como esperábamos, lo que afectó nuestro descanso. Además, el personal, aunque amable, a veces tardaba en responder a nuestras solicitudes. La ubicación era conveniente, pero el estacionamiento se volvió complicado en las horas pico.

La estancia fue muy agradable, especialmente disfruté de la piscina que, aunque pequeña, era acogedora para relajarse. El desayuno fue uno de los puntos altos, con una variedad de opciones ricas que hicieron mis mañanas más agradables. Además, el entorno es realmente bonito. a pocos minutos de varias playas y puntos de interés como el Museo Saraleguinea de Guethary y la Plage de Parlementia, lo cual fue ideal para mis planes de exploración.

La piscina pequeña pero perfecta para relajarse.

Tuvimos una experiencia genial con amigos. El equipo de recepción nos ayudó a organizar actividades como deportes acuáticos y un tour cultural. El lugar es perfecto para disfrutar del país vasco. Asegúrense de reservar con anticipación para asegurar su participación y disfrutar a tope.

El aire acondicionado no era lo mejor, especialmente con el calor. Deberían revisar eso.

Qué maravilla el shabu-shabu! Cada bocado fue una explosión de sabores, perfectamente sazonado y servido. Además, el ambiente en el jardín para el desayuno es un sueño, ideal para comenzar el día con energía y buena vibra. La piscina, aunque pequeña, tiene ese toque acogedor que te hace sentir como en casa.

Una experiencia inolvidable

Un lugar perfecto para relajarme y disfrutar de la comida exquisita. El ambiente en el jardín es sereno, ideal para una comida tranquila. El chef se acercó a nuestra mesa, un detalle encantador que hizo nuestra cena aún más especial. No olvide quedarse para disfrutar el desayuno.

Les freres ibarboure es increíble. La atención del sommelier fue excepcional, ¡tan paciente con nuestro grupo! La comida estuvo espectacular y el servicio fue impecable. Además, la piscina es acogedora y perfecta para relajarse después de un día explorando. Y la ubicación es ideal, cerca de varias playas.

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